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Starfield es uno de los juegos más esperados y celebrados del año. El nuevo proyecto de Bethesda, creadores de sagas como The Elder Scrolls o Fallout, nos propone explorar una galaxia llena de posibilidades, con una libertad y una personalización sin precedentes. El juego se lanzó el pasado 6 de septiembre para Xbox Series X|S y PC, y desde el primer día está disponible en el servicio de suscripción Xbox Game Pass. Sin embargo, no todo son buenas noticias para Starfield, ya que también se ha convertido en el blanco de una cruel masacre mediante review bombing en la plataforma Metacritic.

​El review bombing es una práctica que consiste en inundar un juego con valoraciones negativas, muchas veces sin haberlo jugado o por motivos ajenos a su calidad. Es una forma de expresar el descontento o el rechazo hacia un determinado producto o empresa, pero también puede afectar a la imagen y a las ventas del juego en cuestión. En el caso de Starfield, parece que la principal razón detrás del review bombing es la exclusividad del juego para las plataformas de Microsoft, lo que ha generado el enfado de muchos usuarios que no pueden disfrutarlo en otras consolas como PlayStation.

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​Según los datos de Metacritic, Starfield tiene actualmente una puntuación media de 5,6 sobre 10 en la versión de PC y de 6,4 sobre 10 en la versión de Xbox, basada en más de 4000 reseñas de usuarios. Estas cifras contrastan con la nota media de 8,9 sobre 10 que le han otorgado los medios especializados, basada en más de 100 análisis profesionales. Además, si observamos las reseñas individuales de los usuarios, podemos ver que hay una gran cantidad de ceros y unos, acompañados de comentarios maliciosos, insultantes o sin sentido. Algunos usuarios incluso se han creado varias cuentas en Metacritic para hacer más daño.

​Entre las críticas negativas podemos encontrar argumentos como que el juego es un “Fallout 76 en el espacio”, que tiene muchos bugs y problemas técnicos, que es aburrido y repetitivo, que es un plagio de otros juegos como No Man’s Sky o Mass Effect, o que Bethesda ha engañado a los consumidores con falsas promesas. Sin embargo, muchos de estos argumentos carecen de fundamento o se basan en impresiones superficiales o prejuicios. Por ejemplo, algunos usuarios se quejan de que el juego tiene gráficos anticuados o que no aprovecha las capacidades de las nuevas consolas, cuando lo cierto es que Starfield utiliza un motor gráfico renovado llamado Creation Engine 2, que ofrece unos resultados visuales impresionantes y un nivel de detalle asombroso.

​Otros usuarios simplemente aprovechan la ocasión para atacar a Microsoft o a Xbox, acusándolos de comprar estudios o de hacer exclusivos temporales. También hay quienes mencionan a PlayStation sin venir a cuento, mostrando su frustración por no poder jugar a Starfield en su consola preferida. Algunos incluso llegan a insultar a los desarrolladores, a los jugadores o al propio director del juego, Todd Howard. Está claro que hay mucha guerra de consolas detrás del review bombing a Starfield, pero también hay mucha ignorancia y falta de respeto.

​Por supuesto, no todas las reseñas negativas son fruto del review bombing. Hay usuarios que han jugado al juego y no les ha gustado por diversos motivos, lo cual es totalmente respetable y comprensible. Starfield no es un juego perfecto ni pretende gustar a todo el mundo. Tiene sus virtudes y sus defectos, como cualquier otro juego. Pero lo que no se puede negar es que se trata de un juego ambicioso, innovador y divertido, que ofrece una experiencia única y diferente a lo que estamos acostumbrados. Un juego que ha sido creado con pasión y dedicación por un equipo de más de 300 personas durante más de cinco años. Un juego que merece ser valorado por lo que es y no por lo que algunos quieren que sea.

​Starfield es un juego que ha cumplido con las expectativas de muchos fans y que ha sorprendido a otros tantos. Un juego que ha recibido elogios de la crítica y de los jugadores que lo han disfrutado. Un juego que ha sido capaz de crear un universo propio, con una historia, una estética y una jugabilidad que lo hacen único. Un juego que nos invita a explorar, a descubrir, a crear y a vivir nuestra propia aventura espacial. Un juego que, en definitiva, merece la pena jugar y no sufrir el acoso de los haters.