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Los usuarios de Windows 11 podrán disfrutar pronto de una mejora significativa en la experiencia de juego, gracias a una funcionalidad que Microsoft está probando en la última versión preliminar de su sistema operativo. Se trata de la Auto Super Resolution, una tecnología que utiliza inteligencia artificial para optimizar la fluidez y los detalles de los juegos compatibles, de forma similar a las soluciones que ofrecen Nvidia con DLSS, AMD con FSR o Intel con su novedoso XeSS.

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​Actualmente, la Auto Super Resolution solo puede probarse en Windows 11 beta, se encuentra en la sección de Configuración‭ → Pantalla ‭→ Gráficos, y permite activarla para todas las aplicaciones o hacerlo de forma individual para cada una. Según Microsoft, esta función está diseñada para mejorar la calidad de imagen y el rendimiento de las aplicaciones que se ejecutan en resoluciones más bajas que la resolución nativa de la pantalla.

​Aunque por ahora esta funcionalidad solo está activa para la versión beta, se espera que esté disponible para todos los usuarios de Windows 11 en una futura actualización. Los entusiastas que quieran probarla antes, pueden hacerlo a través de una herramienta llamada ViveTool, que se puede descargar desde GitHub.

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¿Qué es la superresolución y cómo funciona?

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​Se trata de una técnica que consiste en procesar imágenes en resoluciones más bajas para luego escalarlas a resoluciones más altas, utilizando algoritmos de inteligencia artificial que rellenan los píxeles que faltan y mejoran la nitidez y el contraste. De esta forma, se consigue una imagen de mayor calidad sin sacrificar el rendimiento, ya que se reduce la carga de trabajo de la GPU.

​Esta técnica no es nueva, y ya ha sido implementada por los principales fabricantes de hardware gráfico, como Nvidia, AMD e Intel, en sus propias soluciones. Nvidia fue la pionera con su DLSS (Deep Learning Super Sampling), que utiliza redes neuronales entrenadas con imágenes de alta calidad para generar imágenes escaladas. AMD le siguió con su FSR (FidelityFX Super Resolution), que utiliza un algoritmo basado en el contraste adaptativo para mejorar la definición de las imágenes. Intel, por su parte, presentó recientemente su XeSS (Xe Super Sampling), que combina el aprendizaje automático con el muestreo adaptativo para crear imágenes más realistas.

​Estas soluciones han demostrado su valía, permitiendo un rendimiento gráfico superior en juegos exigentes, especialmente en resoluciones 4K. Sin embargo, cada una tiene sus ventajas y desventajas, y no todas son compatibles con todos los juegos ni con todos los dispositivos. Por eso, la propuesta de Microsoft de integrar la superresolución directamente en el sistema operativo a nivel de software, podría suponer una ventaja competitiva y una democratización del acceso a gráficos de alta calidad para todos los usuarios.

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¿Qué beneficios tendrá Auto Super Resolution de Microsoft para los usuarios?

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​Podría tener varios beneficios para los usuarios de Windows 11, tanto para los gamers como para los profesionales que trabajan con aplicaciones gráficas. Algunos son:

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• Mejorar la calidad de imagen y el rendimiento de los juegos en resoluciones altas, sin necesidad de tener una tarjeta gráfica de última generación.

• Aumentar la vida útil de los dispositivos, al reducir el consumo de energía y la generación de calor de la GPU.

​• Ampliar el catálogo de juegos compatibles con la superresolución, al no depender de las soluciones propietarias de los fabricantes de hardware.

​• Facilitar el ajuste de la configuración gráfica, al ofrecer una opción única y automática para optimizar la experiencia de juego.

​• Potenciar la creatividad y la productividad de los profesionales que trabajan con aplicaciones gráficas, al mejorar la calidad de sus proyectos y reducir el tiempo de renderizado.

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¿Qué desafíos tendrá que afrontar Microsoft para implementar la Auto Super Resolution en Windows 11?

​Estamos tratando con una función prometedora, pero también plantea algunos desafíos que la compañía tendrá que afrontar para implementarla con éxito en Windows 11. Algunos son, por ejemplo:

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• Garantizar la compatibilidad con todos los tipos de pantallas, resoluciones y formatos de imagen, sin provocar distorsiones, artefactos o pérdida de calidad.

• Asegurar la estabilidad y la seguridad del sistema operativo, al introducir una funcionalidad que podría interferir con otros procesos o aplicaciones.

​• Ofrecer una experiencia de usuario sencilla y transparente, al integrar la función en la configuración del sistema operativo y no requerir de instalaciones o actualizaciones adicionales.

​• Competir con las soluciones de los fabricantes de hardware, que podrían ofrecer una mayor calidad o rendimiento en sus propios dispositivos o juegos.

​• Convencer a las personas de que la superresolución es una funcionalidad útil y beneficiosa, y no una forma de engañarlos o degradar su experiencia de juego.

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​Por ahora, el resto de personas tendrán que seguir trabajando con el sistema de resolución estándar. El tiempo nos dirá si esta solución de Microsoft realmente supone un adelanto técnico o si se tratará de otro proceso más que, siendo apenas usado, consume energía y recursos innecesarios.